Numerosas restricciones y varios escándalos vienen marcando la antesala del mundial de Fútbol de Qatar 2022. Al margen de lo que será la competencia, las polémicas por las cuestionables leyes se han convertido en uno de los temas principales y en los últimos días ya se han originado algunos incidentes.
Aunque aficionados de todo el mundo esperan el pitazo inicial, del otro lado de la moneda vemos protestas, escándalos y numerosas restricciones que vienen catalogando a este mundial como uno de los más controvertidos. Los escándalos por ser Qatar la sede del mundial de este año 2022 empezaron cuando el diario británico The Guardian afirmó que 6 mil 500 trabajadores inmigrantes habían muerto en ese país. La mayoría de ellos eran empleados de proyectos relacionados con el mundial.
El promedio es que doce de ellos han muerto cada semana si se toma en consideración desde el primer año en que se empezaron a construir los ocho estadios en el 2010.
Por si fuera poco, las leyes que cada extranjero debe respetar en esas tierras han hecho regresar a los tiempos medievales a cientos de ciudadanos. Para comenzar, las parejas no podrán mostrar su amor en público. De hecho, esto puede ser penado con cárcel, más aún si el vínculo sentimental es con una persona del mismo sexo.
Las mujeres no podrán usar faldas demasiado cortas, ni shorts o poleras que muestren sus cinturas. En tanto, los hombres no pueden andar a torso desnudo, ni menos sacarse la camiseta dentro de los estadios.
Y es que ni el país más rico del mundo ha podido comprar lo que no tiene valor: la libertad y los principios. Tanto así que el cantante británico Rod Stewart rechazó el millón de euros que le ofrecieron para presentarse. Por redes sociales, la artista Dua Lipa también informó que se negó a formar parte de la inauguración.

En materia del trabajo periodístico, solo basta escuchar lo que el periodista de Caracol TV de Colombia, Luis Felipe Jaramillo acusó mediante un tiktok sobre las prohibiciones que tienen los reporteros.
De acuerdo al periodista, la credencial otorgada para los trabajadores de Caracol en Qatar, sirve para reportar desde cualquier parte del país. Sin embargo, Jaramillo comentó que a los diferentes lugares que han ido, les han prohibido grabar.

Al margen de las declaraciones, no podemos evitar señalar que Qatar es uno de los países donde la homosexualidad está penada hasta con 10 años de prisión. Es un país en el que las 754 mil mujeres que nacieron ahí no pueden elegir casarse, obtener una beca o laborar en el sector público sin la autorización de sus «guardianes masculinos», es decir, sus padres, hermanos, tíos, abuelos, o si están casadas por sus esposos, así lo establece la legislación del mencionado país.
Hace tan solo unos días, el embajador qatarí para el mundial, Khalid Salman, no dudó en declarar abiertamente que la homosexualidad es un problema mental. Casi al mismo tiempo, el expresidente de la FIFA Joseph Blatter reconoció que se arrepiente de haber permitido que Qatar albergue este Mundial, aunque no por todas las razones que hemos expuesto, sino por los aspectos técnicos y logísticos pues aseguró que los mundiales son para países grandes. Pero como bien dicen, es más fácil pedir perdón que pedir permiso.